Con Garance, Noah, Anahi, louna, Charlotte, Léo, Jeanne, Arthur, Marceau, Ofelia, Vanessa, Loïc y François.
Última salida mensual de la temporada. Les Childs, Teens y Olds se trasladaron a Céret. Seguimos el nuevo camino, el primero generaba molestias a los residentes. El cañón comienza con una caminata acuática de 350 m intercalados con dos saltos de unos 4 m de altura equipados. La primera cascada de 10 metros se sumerge en una cuenca poco profunda, es seguido por una cascada de 6 metros de tobogán (posibilidad de saltos de margen izquierda de 5 mo 8 m). Siguen dos toboganes de 3 m, luego caminamos 80 metros y nos encontramos con una cascada de 4 metros seguidos de 3 macetas pequeñas, de un salto, y todavia 3 macetas pequeñas. Finalmente llegamos al final del cañón con 3 cascadas que se suceden : uno de 17m, otro de 6m y el último de 12 metros todos separados por macetas muy hermosas.
Disfrutamos el curso pero las impresiones a la salida del cañón son mixtas : demasiados tiempos de espera al cruzar los seis rápeles. Arruinó la diversión del descenso. Además de cortar el ritmo, el frio se ha apoderado de algunos de nosotros. Mala elección ! Planearemos otro descenso el próximo año. Quizás volver al Terminet o visitar las Aneilles ?
Experimentar nuevas sensaciones te permite cambiar tu percepción y expandir tu zona de confort.. Promueve la confianza en uno mismo. Cuando nos superamos físicamente, que vamos mas alla de nuestros limites, siempre es doloroso. La duda se instala. No es divertido. La mente es tan importante como el cuerpo.. La cabeza no va sin las piernas. Debe darse un camino global para llegar más lejos. Como si el cerebro aceptara creerlo. Cualquier deportista lo sabe, incluso si tiende a olvidarlo después. Pero que felicidad despues del esfuerzo ! Nos sentimos tan bien después de darlo todo. La mente lavada, tranquilo, apaciguado. Siempre es un impulso de moral ! Es bueno ! El barranquismo conduce tanto al bienestar físico como a la tranquilidad psicológica. La adrenalina que se produce durante los saltos convierte a este deporte en un auténtico antidepresivo. El barranquismo te permite comprender mejor tu cuerpo y controlar tus emociones.. La práctica del barranquismo no es para élites. Así que no dudes en dar el paso.
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